¡Querido K! plasma los sentimientos de un noviazgo vistos desde la perspectiva de una joven que aún anhela no haber perdido una amistad solo por intentar llevar un noviazgo.
Hola ¿cómo estás?
Aquí estoy yo, esperando volver a verte, sabes, he escuchado estos días una canción que dice "lo tuvimos todo cuando fuimos nada, pero por querer ser todo, ahora ya no somos nada" y en automático mi mente pensó en ti.
Sabes, no esperaba aún extrañarte, han pasado 9 años desde que elegimos separarnos, y aún te extraño como el primer día, hace tres años volviste a mí y créeme que tenía ganas de huir contigo y demostrarle al mundo que podíamos ser mejores, pero no podía hacerlo.
Sabes, yo lo dije en esa última visita que tuvimos 'tengo cáncer' y no podría volver a luchar por ti como en aquel tiempo atrás lo hice. Te amo, y no era para tanto, porque aún lo sigo haciendo, aunque me he permitido no amarte más que a mí misma.
Hoy he logrado ver que ya no es como cuando nos conocimos, ahora tengo una vida estable sin ti, y no me malinterpretes, yo aun llego a pensar en ti. Recuerdo las largas caminatas en las que nos tomábamos la mano y sin ser nada éramos todo. Recuerdo tu apoyo cuando perdí familiares y amigos a causa de la muerte y recuerdo los detalles que no veía cuando los hacías.
En parte soy muy consciente de que cuando tú lo dabas todo yo no estaba lista, mejor dicho, no veía el amor en más personas que en el novio que tenía y que falleció justo en esas fechas. A pesar de todo tu estabas ahí, yo amaba a J, pero tenerte a ti, era tener a alguien que me hacía feliz solo por desear hacerme feliz, sin títulos más allá de un simple amigo, llegaba a pensar que, si las cosas con J hubieran fallado, no habría querido a nadie más que tú en mi vida.
Hoy lo veo claro, pues tu no estabas dispuesto a esperarme, y lo vi, lo vi cuando J falleció y no pude estar con él para despedirme, pero recuerdo haber anhelado ir a la escuela y poder llorar en tu hombro, recuerdo querer buscarte con un mensaje y una llamada, pero al mismo tiempo preferí tenerte cerca, pero... Debí pasarlo sola, al final del día ¡era tarde! eso fue lo único que lograste decirme. Pues... fue el último día que nos vimos durante el resto de ese año.
Yo podría haber olvidado lo que no tuvimos, pero volviste a mi vida y ¿Que te cuento?
Después de todo este tiempo decidimos atrevernos a ser TODO, decimos ser lo que años atrás no pudimos, o al menos yo estaba dispuesta a hacerlo, pero tu... Tu decidiste romper mis sentimientos hacia ti, y tal vez para ti no tenía importancia, pero recuerdo a tu madre preguntar ¿Con quién estas? y solo dijiste que era una amiga.
El título de amiga cuando habíamos elegido ser novios me abrió los ojos. Así que simplemente me despedí de ti, tome un transporte y fui a reunirme con mi grupo de amigos reales y te deje ahí, yo sabía que tu madre tenía la ilusión de que tú y yo fuéramos más que amigos, y por el tiempo que llevábamos juntos al menos merecía que supieran de nuestra decisión de noviazgo, pero... no fue así.
Ese día todo fue a peor, yo deje de buscarte y tú de mostrar interés, hasta que me viste con alguien más que era un amigo reaccionaste y la mala era yo, pero no importo. Ya no éramos nosotros juntos ahí se fracturó todo. Aunque... en memoria de todo lo que habíamos vivido aún salíamos, pero se volvió difícil y lo mejor era separarse... bueno lo intentamos en muchas ocasiones, pero no al final ahí estábamos...
Y me toco a mi ser la madura y dejarte sin más.
Al menos eso pensaba, ya que al volver y tras aquel accidente a los 18 años olvidé muchas cosas y tú estabas muy presente, no debía hacerlo, pero te busque, y nuevamente lo intentamos un par de veces, aunque nuevamente me toco a mi elegir separarnos.
Recuerdo mi cumpleaños número 19, ya que estuviste conmigo y consideramos intentarlo por última vez, y lo único que hice por última vez fue borrar todo de ti, fotos, mensajes, llamadas, registros, todo excepto un libro que tenía tuyo.
23 días después inicie una relación estable con mi actual esposo, y ten por seguro que el me ayudo a quitarte de mi vida. Aunque admito que por años el escuchar tu nombre me recuerda a ti, a esos momentos en que sin títulos lo teníamos todo. Al menos era así para mí, pues J me hacía tan feliz y tu complementabas lo demás en mí, la felicidad que tú me dabas era diferente, pero especial. Y parece egoísmo el hecho de que solo piense en esos momentos en que lo teníamos todo, pero ahora veo que tu no has tenido de mi la única forma que a ti te gustaría.
Tiempo después te devolví el libro, te dije que al devolverlo no tendríamos más intentos y estuviste de acuerdo... Sufrí, ¿puedes creerlo? tal vez no, pero lo hice, porque ahí se terminaron seis años de esforzarme por que funcionará, en ti tenía un mejor amigo y una pareja (al menos el intento de una) en ese tema no logramos establecer bien qué era lo que éramos.
Así llegamos al Julio de 2021, cuando decidiste volver a mi vida. Solo fueron un par de días, pero pusiste mi mundo de cabeza. Pues note que realmente no te había sacado de mi mente, me contaste cosas de ti que me alegraron, desde el bebé hasta la maestría, la moto y lo demás no me importaron. Pero objetaste cuando me aferre a que conmigo no lo habrías logrado, porque me conozco, y para ese momento conocía mi situación médica, no mentía al decir que varias frases que habías mencionado al inicio de todo me habían marcado una huella de ti que no quería en mi... 'decirme amiga cuando éramos novios' fue una, 'ser mi amante en lugar de mi esposo' fue otra y ten por seguro que aún hay más de las frases que me han marcado.
Y por eso, aunque me doliste en ese momento elegí cerrar ese ciclo a tu lado.
Pero no contaba con que desaparecerías de mi vida al enterarte de que me había casado. Porque si, ese mismo año me case con alguien que se quedó conmigo después de conocer mi cáncer, mis complejos, mi depresión, mis perdidas y todo lo malo en mí, él no lo veía, y eso me gustaba. Era totalmente diferente a ti, y aunque en ocasiones me hubiera gustado que tú y yo hubiéramos funcionado, me dejaste claro que el cáncer lo pasaría sola, pues si pequeños detalles nos rompieron... Mi enfermedad lo habría hecho más.
Querido K, Te ame, Me amo y me amare, porque ya es momento de no pensar en nadie más que en mí, no lo he contado todo aquí, porque nuestra historia aún tiene más, y aunque al final he decidido cargar con la culpa no será por mucho tiempo, llevo un año ya en remisión del cáncer, pero el medico me dice que aún no es un logro, así que si encuentras esto y quieres volver... Solo te podré ofrecer lo mismo que al comienzo, una amistad sincera.
Querido K.
No puedo elegirte a ti, porque me he elegido a mí.
Att: A
¡Querido K! es un escrito de autor independiente, que asocia su historia con la siguiente canción.